Autor: Stig Jørgensen
Chief Operations Officer, LanguageWire
LinkedIn
Autor: Stig Jørgensen
Chief Operations Officer, LanguageWire
LinkedIn
El uso de tecnología digital y soluciones basadas en los datos obligan al sector lingüístico a garantizar la seguridad de los datos y la conformidad normativa.
El panorama del sector lingüístico evoluciona para adaptarse a las necesidades comerciales más actuales. Buena parte de esta evolución se debe a la muy necesaria transformación digital. No obstante, a medida que las empresas se vuelven gradualmente más digitales, la seguridad de los datos también aumenta su complejidad.
Como Chief Operations Officer de LanguageWire, la seguridad de los datos es de máxima prioridad para mí, además de uno de los aspectos que mayor impacto tienen en la actualidad sobre el sector lingüístico.
El rápido desarrollo de la tecnología digital y las soluciones basadas en los datos obliga a las empresas a aplicar medidas que permitan garantizar la seguridad de los datos y la conformidad normativa.
Durante los últimos años, la prevención de los incidentes de seguridad y el robo de datos de usuarios es una de las mayores preocupaciones para las organizaciones empresariales de todo el mundo. Los escándalos relacionados con los datos han afectado recientemente a empresas consolidadas de la talla de Marriot International, Quora, Facebook o Twitter, por nombrar solo algunas de ellas. En este artículo desgranaremos los motivos por los que la seguridad de los datos es una prioridad para todo el sector lingüístico.
Los LSP desempeñan un papel fundamental en la cadena de suministro, ya que tratan con una cantidad ingente de datos sensibles de los clientes (información financiera, propiedad intelectual, datos de los empleados, etc.).
Los LSP tienen, por tanto, la obligación de trasladar esa responsabilidad a todos los empleados de su organización, así como de implementar sistemas que estén a la altura de las normativas de seguridad establecidas y sean capaces de evitar que se produzcan incidentes que pongan en riesgo la seguridad de los datos.
En el sector lingüístico, el cumplimiento de las normativas internacionales en materia de seguridad ha dejado de ser un mero valor añadido a la hora de captar nuevos clientes. A día de hoy, la evaluación de riesgos y las auditorías de seguridad son la norma habitual durante los procesos de licitación y presentación de propuestas de traducción.
Un ejemplo sonado fue la filtración de datos de Translate.com, que tuvo lugar en 2017. En este caso se detectó que el uso de la herramienta online de traducción automática de Translate.com provocaba la propagación por Internet de los datos sensibles de sus usuarios.
Para McKinsey, «la proliferación de filtraciones y la demanda de privacidad y control de sus datos por parte de los consumidores ha obligado a los gobiernos a adoptar nuevos reglamentos, como el Reglamento General de Protección de Datos (RGPD) europeo o la Ley de Privacidad del Consumidor de California (CCPA) de dicho estado norteamericano».
Estos reglamentos han desempeñado un papel fundamental en la forma de tratar los datos por parte de las empresas, además de fomentar el desarrollo de la seguridad de los datos como diferenciador clave en todos los sectores.
Dentro del sector lingüístico, la seguridad de los datos y la conformidad normativa se han convertido en aspectos a tener muy en cuenta a la hora de generar confianza y crear una ventaja competitiva.
La Organización Internacional de Normalización (ISO, por sus siglas en inglés) «reúne a expertos de diversos campos para poner en común sus conocimientos y desarrollar normas internacionales que sean relevantes para el mercado, de adopción voluntaria y basadas en el consenso con el fin de fomentar la innovación y ofrecer soluciones a los retos de carácter global».
Dado que los LSP tratan con datos de carácter sensible, asociarse con uno que cumpla con los niveles de calidad y seguridad establecidos por la ISO ha dejado de ser un complemento atractivo para convertirse en un requisito fundamental.
La ISO 27001 es una norma internacional para el tratamiento seguro de la información. Se trata de una certificación reconocida que establece los requisitos aplicables al Sistema de Gestión de la Seguridad de la Información (SGSI) de una organización. En este momento, tan solo 32 000 empresas de todo el mundo disponen de certificación ISO 27001.
LanguageWire es una empresa con certificación ISO 27001, lo que sitúa nuestros estándares de seguridad por encima de la media de nuestros competidores del sector lingüístico. Disponemos de políticas y procedimientos internos demostrables que abarcan determinados aspectos de la seguridad de la información.
La ISO 17100 es una norma que certifica la existencia de los «procesos, recursos y demás aspectos necesarios para la prestación de servicios de traducción de calidad conformes a las especificaciones aplicables».
La ISO 17100 exige a los LSP la acreditación de las cualificaciones y las competencias de los traductores, las aptitudes de los Project Managers, así como la gestión profesional de los procesos principales y de otros procesos relacionados con la prestación de servicios de traducción de alta calidad.
LanguageWire es una empresa con certificación ISO 17100. Para los usuarios de LanguageWire, la certificación ISO 17100 garantiza el cumplimiento de los mejores procesos en los proyectos de traducción.
La norma ISO 9001 establece una serie de condiciones concretas que definen la idoneidad de un sistema de control de calidad «basado en una serie de principios para el control de la calidad entre los que destacan aspectos como la marcada orientación al cliente, la motivación y la implicación por parte de la dirección, la gestión de los procesos y su mejora constante».
La certificación ISO 9001 es un indicador positivo de que el LSP dispone de un sistema de control de calidad adecuado que garantiza la máxima calidad y coherencia del contenido.
LanguageWire es una empresa con certificación ISO 9001. Hemos desplegado sólidos sistemas de control de calidad para asegurarnos de que el contenido global que entregamos a nuestros clientes sea de la máxima calidad.
La Traducción Automática (TA) está redefiniendo el sector de los servicios lingüísticos, dado que cada vez son más las empresas que se decantan por la TA para optimizar sus flujos de trabajo con contenido.
Al pensar en traducción automática, lo primero que nos viene a la cabeza son las aplicaciones online gratuitas como Google Translate. El problema es que el tipo de traducciones que ofrecen no son aptas para entornos laborales. La preocupación por la seguridad y la falta de control sobre el contenido, especialmente cuando se trata de soluciones para la traducción de código abierto, supera con creces el ahorro de los costes.
Lo que mucha gente no sabe cuando utiliza una solución de TA gratuita como Google Translate es que implica la aceptación de las Condiciones del servicio de Google, que ceden a Google el derecho a controlar los datos de su empresa. Google Translate puede resultar útil para hacer traducciones rápidas sobre la marcha y para uso personal, pero no está diseñado para ofrecer un servicio de traducción seguro para empresas.
LanguageWire es una empresa con certificación ISO 18587, lo que demuestra que la traducción automática de máxima calidad es el objetivo que persigue el equipo especialmente dedicado al aprendizaje de nuestro motor de traducción automática.
Estas son las cuatro preguntas que deberías preguntar cuando estés seleccionando una LSP, si quieres asegurarte de que se cumple con todas las prácticas recomendadas y las normas internacionales.
Selecciona un LSP que cumpla con todas las normas internacionales y las prácticas recomendadas.
Es fundamental que selecciones un LSP que cumpla con las leyes de protección de los datos personales del país en el que operas. En los Estados Miembros de la UE, el cumplimiento del RGPD es obligatorio, mientras que en EE. UU. sucede lo propio con la CCPA.
Como comentábamos anteriormente, las normas ISO nos permiten acotar de manera rápida y sencilla la lista de LSP con los que vale la pena asociarse para crear contenido global. Los certificados ISO ofrecen la certeza de que el LSP seleccionado tomará las medidas adecuadas para garantizar la calidad y la seguridad de los datos.
Con el fin de garantizar la seguridad, fiabilidad, escalabilidad y rentabilidad, el LSP seleccionado debería poder encargarse del tratamiento de los datos de sus clientes a través de una infraestructura de nube privada.
«Una nube privada se compone de recursos informáticos que solo utiliza una empresa u organización. Esta nube privada puede encontrarse físicamente en el centro de datos de tu organización o en el de un proveedor de servicios externo.
Si pretendes utilizarlas en un contexto empresarial, evita a toda costa las soluciones de TA online, ya que no pueden garantizar las medidas de seguridad de los datos que necesitas para las traducciones de tu empresa. Más bien, lo recomendable sería optar por un LSP con una trayectoria consolidada capaz de ofrecer una solución de TA segura.
Si vas a externalizar la producción y traducción de contenido, es importante valorar también la seguridad de los datos. Por lo tanto, colaborar con un LSP requiere de un profundo conocimiento de la tecnología y los procesos que hacen posible la prestación de estos servicios.
La evaluación de las medidas en materia de privacidad y seguridad implementadas por la empresa te permitirá disfrutar de la tranquilidad que necesitas para crear contenido global. El cumplimiento de la legislación relativa a la privacidad, los correspondientes certificados ISO (ISO 27001, ISO 17100 , ISO 9001 e ISO 18587) y una infraestructura basada en la nube privada son los criterios por los que deberías regirte en la selección de un LSP.
¿Cómo podemos ayudarte?
Tu viaje hacia una experiencia en la gestión lingüística eficiente y sin complicaciones comienza aquí. Cuéntanos qué necesitas y te ofreceremos la solución perfecta adaptada a tu empresa.